La conferencia tuvo lugar en el Aula Magna de la facultad de Filosofía y Letras el pasado jueves 19 de noviembre. El aforo estuvo casi completo, en su mayoría por el claustro de profesores del máster de Patrimonio musical y por alumnos del Grado de Historia y Ciencias de la Música. Tras una breve introducción por parte de Joaquín López, el catedrático Antonio Martín Moreno presentó a la conferenciante.

Alicia Pire Méndez de Andés es licenciada en Geografía e Historia. Cursó estudios complementarios en Dirección de empresas consultoras, protocolo y gestión de eventos y formación. A partir del 2013  sustituyó a José Luis Jiménez en su labor como gerente de la Orquesta Ciudad de Granada.

El tema principal que se abordó en la hora y cuarto de conferencia, aproximadamente, fue la problemática que surge a la hora de plantear la gestión de una orquesta como la OCG. Y no es que estas resulten polémicas, como Pire arguyó, sino que para que un organismo profesional funcione, deben llevarse de manera inteligente una serie de decisiones y direcciones de programación.

Nuestra orquesta formada desde hace 25 años, es de titularidad pública. Pire explicó que en España existen un total de 27 orquestas sinfónica sufragadas con fondos públicos. El mayor de los problemas es su alto déficit, ¿qué significa esto? , que generan más gastos que ingresos, en principio. Sin embargo, esto se intenta enmendar tomando medidas como: disminuir la cantidad conciertos, bajar las nóminas, reducir el repertorio de recuperación o de nueva creación por uno otro que no implique  derechos de autor y por tanto el gasto sea menor. La gerente prevé que deuda de la OCG será saldada en el primer trimestre de 2016 gracias a este tipo de medidas de gestión.

Con la ayuda del público fijo que tenían las orquestas, éstas lograron mantenerse. La crisis produjo que los cachés se redujeran hasta casi la mitad, se le dio a jóvenes músicos la oportunidad de trabajar y formarse con la plantilla y, además, se requirieron musicólogos para realizar las notas al programa mediante diferentes tipos de prácticas universitarias.

Una de las mayores preocupaciones de las orquestas es la captación de un nuevo público joven. Mediante gráficas pudimos observar que el tanto por ciento de oyente fijo es el mismo que hace décadas. Para ello, la OCG propone actividades educativas y de difusión cultural, como las que se desean realizar en verano de 2016 en el Auditorio de Manuel de Falla u otros proyecto de inclusión social en el que participarán personas con discapacidad intelectual junto a los músicos.

Es necesario otro modelo de gestión que innove y que promueva la realización de convenios con la UGR para la difusión de artistas locales, o la inclusión de nuevos tipos de géneros musicales, como el rock.

Miguel Ángel Moreno Villén
Editora, Belén Moreno Gil